El torreón del Duque de Frías se demolió hace unos 150 años porque amenazaba ruina. Estaba cerca de lo que hoy es la piscina del Sr. Agustín Marín. La piedra de dicha construcción se vendió y empleó en otras construcciones y un escudo coronado se guardó durante varios años en lo que era entonces la escuela del pueblo; en la Plaza de la Fuente. Edificio conocido por el Mesón.

La construcción del edificio de la nueva escuela, hoy totalmente reformado y sede del Ayuntamiento, fue realizada por Don Albino Sendino, hermano de Argimiro y en su fachada sur se colocó dicho escudo que, aunque algo deteriorado, todavía hoy puede verse.

Este blasón podría pertenecer al Duque de Frías; aunque también han tenido propiedades en el pueblo el Marqués de la Rosa, Marqués de Viana y Marqués de Tamarón.

Dicen que años después de la destrucción del torreón un carro que pasaba por el camino cercano hundió una de sus ruedas en lo que luego resultó ser una especie de cueva en la que se encontró una orza de cobre que se depositó en la iglesia, donde todavía se encuentra.

En varias casas del pueblo se ven piedras labradas:

Sobre el dintel de la puerta de la casa del Sr. Narciso Marín, que se sabe fue un convento, hay un blasón que representa: Escudo partido. En la primera partición la Sagrada Forma sobre un cáliz. La segunda partición está cortada. En la parte superior una Tiara Papal y en la inferior las llaves de San Pedro. En la parte trasera de esta misma casa hay también varias cruces de Jerusalén con inscripciones.

En el dintel de la puerta de entrada de la casa de la difunta señora Concepción Marín, junto a la anterior, hay una torre con dos ¿lobos? Rampantes.

Sobre una ventana de la casa del Sr. Tomás Mínguez una inscripción que dice: ROGE   AÑO 1807.

Sobre una ventana del Mesón, actual Ayuntamiento, otra inscripción que dice: ESTE MESON SE HIZO EN EL AÑO 1807.

En el almacén del difunto Sr. Agapito Antón, a ambos lados de la puerta, dos rosetas labradas.

Sobre la puerta de entrada a su casa una Tiara Papal y bajo ella las llaves de San Pedro. La esquina de dicha casa está labrada para evitar el canto vivo.

El torreón del Duque de Frías se demolió hace unos 150 años porque amenazaba ruina. Estaba cerca de lo que hoy es la piscina del Sr. Agustín Marín. La piedra de dicha construcción se vendió y empleó en otras construcciones y un escudo coronado se guardó durante varios años en lo que era entonces la escuela del pueblo; en la Plaza de la Fuente. Edificio conocido por el Mesón.

La construcción del edificio de la nueva escuela, hoy totalmente reformado y sede del Ayuntamiento, fue realizada por Don Albino Sendino, hermano de Argimiro y en su fachada sur se colocó dicho escudo que, aunque algo deteriorado, todavía hoy puede verse.

Este blasón podría pertenecer al Duque de Frías; aunque también han tenido propiedades en el pueblo el Marqués de la Rosa, Marqués de Viana y Marqués de Tamarón.

Dicen que años después de la destrucción del torreón un carro que pasaba por el camino cercano hundió una de sus ruedas en lo que luego resultó ser una especie de cueva en la que se encontró una orza de cobre que se depositó en la iglesia, donde todavía se encuentra.

En varias casas del pueblo se ven piedras labradas:

 

  • - Sobre el dintel de la puerta de la casa del Sr. Narciso Marín, que se sabe fue un convento, hay un blasón que representa: Escudo partido. En la primera partición la Sagrada Forma sobre un cáliz. La segunda partición está cortada. En la parte superior una Tiara Papal y en la inferior las llaves de San Pedro. En la parte trasera de esta misma casa hay también varias cruces de Jerusalén con inscripciones.
  • - En el dintel de la puerta de entrada de la casa de la difunta señora Concepción Marín, junto a la anterior, hay una torre con dos ¿lobos? Rampantes.
  • - Sobre una ventana de la casa del Sr. Tomás Mínguez una inscripción que dice: ROGE   AÑO 1807.
  • - Sobre una ventana del Mesón, actual Ayuntamiento, otra inscripción que dice: ESTE MESON SE HIZO EN EL AÑO 1807.
  • - En el almacén del difunto Sr. Agapito Antón, a ambos lados de la puerta, dos rosetas labradas.

Sobre la puerta de entrada a su casa una Tiara Papal y bajo ella las llaves de San Pedro. La esquina de dicha casa está labrada para evitar el canto vivo.

Josetxo Mínguez, año 2001